Huelga y Represión: Arrestos en Suiza Dairy

por Isabelino Montes

La calma de la mañana se rompió abruptamente frente a las instalaciones de Suiza Dairy, donde trabajadores y trabajadoras llevan a cabo una huelga en defensa de sus derechos laborales. Las tensiones alcanzaron su punto más alto cuando la policía arrestó a varios manifestantes, incluyendo a los líderes obreros José López Pacheco, Presidente de la CGT, y Scott Barbés, líder de la misma organización.

Durante su arresto, Barbés no dudó en enviar un mensaje claro y contundente: "Antony Cuevas, te convertiste nuevamente en el verdugo del pueblo y en alicate de las empresas privadas. Puedes sacar a cualquiera de la papeleta, pero al pueblo no lo sacarás nunca de la calle". Este llamado a la resistencia resuena con fuerza entre los trabajadores que continúan en pie de lucha.

José Pacheco, por su parte, señaló a quien considera el verdadero criminal en esta situación: Pablo Vallejo. "A quien tienen que arrestar es a Pablo Vallejo", afirmó, dejando claro que, a pesar de los arrestos, la huelga seguirá adelante.

Los arrestos se produjeron en un contexto de confrontación con rompehuelgas, enviados por la empresa para provocar a los/as trabajadores/as. A pesar de la paralización de la producción, estos individuos intentaron nuevamente ingresar a las instalaciones, exacerbando aún más las tensiones.

Este incidente pone en evidencia la parcialidad de las instituciones del estado capitalista, que han rechazado en los tribunales las manifestaciones de los trabajadores y ahora actúan a través de la policía para reprimir sus justas demandas. La coordinación entre la empresa y el estado para sofocar la huelga cuestiona la validez democrática de un sistema que criminaliza las luchas obreras.

El llamado ante los eventos de esta mañana es claro: los trabajadores deben superar esta situación creando organismos políticos independientes de los partidos burgueses, capaces de representar verdaderamente sus intereses y luchar por una justicia laboral que, en este momento, parece lejana. La lucha de los trabajadores de Suiza Dairy es un espejo de la lucha más amplia entre el capital y el trabajo asalariado donde los derechos laborales son constantemente puestos a prueba por los intereses corporativos y la complicidad estatal.






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